ENTRE GALLOS Y MEDIANOCHE

MATEO 27:1-10

V. 1. Toda la noche y de una manera absolutamente ilegal, Jesucristo ha estado siendo juzgado, luego golpeado por los mismos jueces (¿se imaginan eso? ¡Los jueces golpeando a un acusado! Ni en nuestro país se ve esto.)

Pero era tal el odio hacia el Señor que hacían cosas terribles que iban aun contra sus propias leyes. ¿Por qué lo odiaban? Jn 7:7; 15:18; ¿Por qué mató Caín a su hermano? 1Jn 3:12.

Los cristianos no debemos extrañarnos si el mundo también nos odia, Jn 15:18-20.

Aplicación: ¿Aborreces u odias a alguien?1Jn 3:10, 14-15.Lastimosamente, el “cainismo” está muy enraizado en la naturaleza humana.

Tú dirás: “Yo nunca hago ni haré esto.” ¿Y cuando  insultas a tu prójimo? ¿Cuando te niegas a perdonar a alguien que te ha ofendido?  ¿Cuándo castigas con rabia a tu hijo?

 

V. 2. Lo llevaron atado como si fuera un criminal peligroso. Lo llevaron a Pilato quien era el gobernador del imperio romano, pues él era el único que podía sentenciar a muerte.

Aquí Mateo hace un paréntesis del relato y pasa a narrar lo que ocurría simultáneamente.

 

II. El remordimiento del traidor. (vs. 3-5)

V. 3. Parece que pensaba que Jesús reaccionaría y pelearía por su propia vida y traería salvación a Israel. “Viendo que era condenado sintió remordimiento…” (NVI)

(2Co 7: 10).

¿A quiénes devolvió las monedas? El remordimiento religioso no sirve. Judas fue a los enemigos de Jesús.

La religión, cualquier religión, basada en reglas es enemiga de la gracia de Dios. No salva a nadie.

Judas podía ir al crucificado y pedirle perdón, y nuestro Señor se lo hubiese concedido. ¡Acude siempre a Cristo!

V. 4. Reconoce su pecado, pero no fue a Jesús. ¿Qué dice la gente? “Todos somos pecadores”. ¡El conocimiento del pecado no salva a nadie! ¡Sólo Cristo salva!

Judas debía ir a la Cruz y decir “Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.”

Los sacerdotes lo rechazan. “Es tu problema. ¡Qué nos importa!”

Así es el diablo: al principio te seduce, te hace sentir bien; pero después que te tiene bien atrapado o inutilizado, te bota. Ya no le sirves más. ¡Rechaza la tentación antes que se vuelva pecado!

V. 5. Arroja la ganancia de su pecado, pero como no tenía paz por su pecado, eligió el suicidio. ¡Nadie debe tomar su vida por sus propias manos! Dt 32:39; 1Sm 2:6.

Si estás en graves conflictos, si piensas que no hay solución para tu vida y tus problemas, ¡no hagas como Judas! Acude a Jesucristo, confiesa tus pecados y él te dará la gracia para continuar en triunfo, en victoria.

III. Los corruptos y el traidor. v. 6.

V. 6. ¡Qué sacerdotes tan corruptos e hipócritas!

¡Ellos fueron los culpables, y ahora se hacen los buenitos religiosos! Casi seguro que   del tesoro de las ofrendas sacaron las monedas de plata, pero ahora ya no quieren recibir esas monedas.

Eran hipócritas. Se fijaban en pequeñeces, pero transgredían la ley con su corrupción. Odiaban a Jesucristo porque él denunció su corrupción, Mt 23:23-28, 33; Lc 13:10-17.

Ejemplos: Mt 26:65 (cf. Lv 21:10), Jn 5:10, etc. 

¿Cuántas veces obramos así? “Luz en la calle, oscuridad en la casa”

Respecto a “no es lícito…precio de sangre” no hay nada escrito en el AT. Sólo hay un texto que podría explicar la conducta de estos corruptos, Dt 23:18, pero, ¿odiarían y menospreciarían a tal grado a Jesús que lo consideraban como a un perro? Sí, hasta matarlo.

¿Qué de ti? ¿Odias o aborreces a alguien? 1Jn 2:9-11; 3:10-15; 4:7-8.

¿Qué hacer? Mt 5:21-24.

IV. La tumba del traidor. V. 7-10.

V. 7. Para no equivocarse, consultaron qué hacer con el dinero y compraron el campo donde se hacían objetos de arcilla, por lo tanto el lugar estaría lleno de agujeros, ideal para enterrar a los extranjeros (Catacumbas en Roma).

V. 8. Leamos el relato completo en Hch 1:16-19. Como era el dinero de Judas, Pedro dice que éste es el que compró el campo.

V. 9-10. Cumplimiento de la Palabra de Dios.

Treinta monedas de plata, el precio de un esclavo, pero también el precio de Dios mismo,

Zac 11: 12-13. ¡Jesucristo es Dios! Toda la Biblia habla de la deidad de Cristo.

¿Quién es Jesucristo para ti?

Resumen y aplicación:

1. Nunca hagas cosas que están en contra del amor y de la Palabra de Dios.

2. Por más grande e insoluble que te parezca tu situación, jamás tomes tu vida en tus manos. En Jesucristo hay solución para el más grande problema.

3. No te dejes llevar por el odio. No “pongas en cadenas” a los hermanos que te dicen algo que no te gusta, como lo hizo Herodes con Juan el Bautista, Mr 6:17-18.

4. Acude solamente a Cristo para lavar tu pecado, no a la religión, 1Jn 1:9; Pr 28:13.

5. No hagas tus propias leyes morales, de acuerdo a lo que te conviene, como hacían los sacerdotes y los fariseos. Sujétate sólo a la Ley de Cristo.